Antes de que acabe el año se empezará a remodelar el edificio principal donde irán las clases
Así quedará el campus de Guadalajara una vez terminadas las obras/ Universidad de Alcalá
Aunque en un principio la intención era que el nuevo campus de Guadalajara estuviese terminado a principios de 2024 el hallazgo de restos arqueológicos, la pandemia y la guerra de Ucrania, que ha impactado directamente en la subida de los materiales, están retrasando el fin de los trabajos en el nuevo campus universitario de Guadalajara.
La reforma del aulario
A pesar de ello las obras van a buen ritmo y la Universidad de Alcalá ya está buscando una empresa que se encargue de reformar el edificio principal donde irá el aulario. Un edificio que ya está vacío y preparado para empezar su arreglo y división según las necesidades actuales.
Junto a la mejora interior de ese edificio, se construirá otro nuevo al lado que dotará al complejo de todos los espacios necesarios para poder funcionar con normalidad. En la imagen se puede ver que las obras en esta fase afectan a los edificios que están en color rojo y gris.
El proyecto incluye también mejoras en la estética exterior y en el aislamiento de envolventes y ventanas para mejorar la eficiencia energética; "pero mantendrá su fisonomía por lo que seguirá siendo reconocido por los ciudadanos de Guadalajara"- aseguran desde la Universidad.
En este espacio se situara el nuevo salón de actos/ Gu Diario
La idea, según informan desde la propia universidad de Alcalá, es que los primeros estudiantes puedan impartir clases allí en el curso 2026-27.
A la izquierda, junto al Colegio Pedro Sanz Vázquez, ya se ha ejecutado un amplio edificio de aparcamiento subterráneo, de tres plantas, con todas sus rampas de acceso, y sobre él irá otro edificio destinado principalmente a Aulario cuya licencia de obra se solicitará en breve.
El objetivo es crear espacios de conexión abiertos, que dejen pasar la luz y permitan el tránsito de los usuarios del campus, que también será accesible a la ciudadanía de Guadalajara.
Junto a aulas modernas, salas de diverso tipo, laboratorios para distintas titulaciones, despachos de profesores y personal de administración y servicios y Decanatos de Facultades, encontraremos un auditorio, que podrá acoger las sesiones plenarias de Congresos o distintas celebraciones académicas. Ante el edificio principal habrá una gran plaza y un acceso desde la calle 2 de mayo. El complejo se rodea de una zona verde y un paso de vehículos, dentro del vallado perimetral que se ejecutó al principio.
Un presupuesto aumentado
El presupuesto base de licitación es de 31.353.421,50, al que hay que sumar 6.584.218,52 euros en concepto de IVA. En total 38 millones de euros, aunque es una cantidad que se puede ver reducida según las ofertas que presenten las empresas. Según señalan desde la propia universidad el presupuesto se ha visto aumentado porque ha tenido que adaptarse a la subida de precios que ha habido en energía, carburantes y materiales de construcción.
Esta zona se convertirá en aulas/ Gu Diario
La empresa que se encargue de los trabajos tendrá de plazo 27 meses para hacer la obra con lo que estará terminada a principios de 2026. La idea es que las obras comiencen a finales de 2023.
Lo hecho hasta ahora
Desde que comenzaron los trabajos se ha realizado el vallado perimetral del conjunto del campus, el levantamiento arqueológico de la necrópolis con más de 200 enterramientos, las demoliciones interiores de tabiquerías y elementos incompatibles en los edificios del antiguo colegio, y la construcción de un moderno aparcamiento subterráneo de tres plantas, actuaciones que en su mayoría están realizadas o a punto de concluirse según detallan desde la propia universidad. En estos momentos se trabaja, desde la Oficina de Gestión de Infraestructuras y Mantenimiento (OGIM) de la Universidad de Alcalá, para diseñar el nuevo edificio que irá sobre el parking.
Otra zona de aulas ya vaciada para empezar los trabajos/ Gu Diario
La última fase, sobre la que los técnicos de la OGIM también llevan tiempo trabajando, sería la de adaptación de los edificios que actualmente componen la Facultad de Educación y su conexión con el recinto de Cristinas.