En la serrana localidad se imparten cursos medioambientales
La localidad de Umbralejo recibirá este verano 200 estudiantes que participarán en el programa “Recuperación y utilización educativa de pueblos abandonados” con las ayudas concedidas por el Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes. Divididos en grupos de 50, permanecerán en el pueblo durante una semana, en el periodo comprendido entre el 29 de junio y el 26 de julio, con el objetivo de trabajar áreas como la educación ambiental, la convivencia y la recuperación del medio cultural.
La subdelegada del Gobierno de España en Guadalajara, Susana Cabellos, ha recordado que este curso se cumplen 40 años desde la creación del programa, tiempo en el que ha evolucionado desde un enfoque cercano a un campo de trabajo, que permitió la recuperación de las construcciones típicas de estos pueblos, hasta convertirse en una referencia educativa nacional e internacional. “Actualmente, los objetivos están orientados ante todo a la educación para el desarrollo sostenible y el cumplimiento de la Agenda 2030, incidiendo en el aprendizaje de nuevos valores para afrontar los retos climáticos de la sociedad actual”, ha asegurado.
Los participantes son estudiantes de centros públicos de tercero y cuarto de Enseñanza Secundaria Obligatoria (ESO) y Formación Profesional Básica, con edades comprendidas entre 14 y 17 años. En cada contingente se reservan también dos plazas para alumnado de secciones españolas o secciones bilingües de centros de la Unión Europea.
El objetivo de las actividades programadas es afianzar los contenidos curriculares adquiridos en el proceso educativo, pero también acercar a los jóvenes a la vida rural. De esta manera, podrán desarrollar en entornos reales lo que han aprendido durante el curso y, al tiempo, aprender a apreciar la riqueza y variedad del patrimonio natural, social y cultural, respetando su conservación. Además, se formarán en hábitos de vida saludable, trabajo cooperativo y consumo responsable.
Las actividades comprenden trabajos como cuidado del ganado, preparación y mantenimiento de huertos y jardines, reconstrucción de muros, mantenimiento de espacios interiores o limpieza de las instalaciones. También se organizan talleres centrados en artesanía (fragua, cerámica, apicultura, cestería, textiles, cocina, jabones y carpintería), medioambiente (interpretación del entorno y plantas medicinales), salud (primeros auxilios y cosmética natural) y deporte (juegos populares), así como actividades de convivencia y un itinerario pedagógico por el entorno para descubrir la vegetación de la zona, la orografía y los pueblos vecinos.