De izquierda a derecha, el subdelegado del Gobierno, delegado de la Junta, alcalde de Guadalajara, presidente de la Diputación, consejero de Desarrollo Sostenible y el delegado de la ONCE./GUDiario.

Han participado en una curiosa experiencia que les ha servido para experimentar las dificultades de las personas con discapacidad visual

El desayuno a ciegas organizado por la ONCE de Guadalajara con los principales políticos de la provincia ha resultado un éxito. La mayoría se han quedado sin desayunar pero sin grandes estropicios han conseguido salir airosos del paso y lo que es aún mejor: se han metido en los zapatos de los invidentes.

Se celebra desde hoy la Semana de la ONCE en Guadalajara y la experiencia no ha podido ser más enriquecedora. A partir de un simple desayuno, que se ha celebrado en el Casino principal, comensales (representantes de asociaciones e instituciones) y mirones ( los periodistas) hemos visto facilmente que ser ciego es más difícil de lo que parece.

En la experiencia han participado los representantes de varias instituciones: Ángel Canales, subdelegado del Gobierno; José Luis Escudero, consejero de Desarrollo Sostenible; José Luis Vega, presidente de la Diputación Provincial; Alberto Rojo, alcalde de Guadalajara y Eusebio Robles delegado de la Junta en Guadalajara.

Los cinco han entrado en el salón como vuelven los niños del patio del colegio: en fila, cogidos del hombro y acompañados por la profe, en este caso por una técnico de rehabilitación de la ONCE. Cada uno llevaba ya puesto el antifaz con el que han permanecido durante todo el desayuno. Desde el primer momento les han explicado cómo mover las manos para evitar el desastre y poco a poco, palpando, han ido reconociendo los 30 centímetros cuadrados que tenían delante: la taza, el plato, los cubiertos, la copa... El alcalde, afinando el resto de los sentidos, ha ido reconociendo voces y ubicándose en el salón mientras el presidente de la Diputación aunque estaba sentado en su silla, reconocía "sentirse perdido". Los primeros minutos, mientras se servían los cafés, los zumos y se colocaba bollería y pequeños bocadillos, se sucedían las declaraciones sobre la necesidad de mejorar la accesibilidad en todos los ámbitos. El más locuaz era José Luis Escudero, un discurso que ha llevado a Alberto Rojo a advertirle que ya "había que concentrarse en el desayuno".Vega en la difícil tarea de poner mantequilla en el pan/ Gu Diario

La tarea no ha sido fácil. Canales, que no tenía ningún plato de comida cerca, prácticamente no ha probado bocado más que lo que le han ido pasando. Vega, que confesaba sentirse muy perdido, ha sido el primero en atreverse a untarse mantequilla en el pan. Parte ha caído en el mantel y tras darse cuenta (al pringarse) rapidamente ha informado a Rojo para que no se manchara. El alcalde, reconocía que sólo había tomado un actimel, y que desayunar no estaba siendo fácil... Enfrente, al otro lado de la mesa, estaban el presidente de la Federación provincial de Turismo y Hostelería de Guadalajara, Juan Luís Pajares, el Secretario General de CEOE-CEPYME, Javier Arriola y el concejal Ignacio de la Iglesia qu con gafas de visibilidad reducid intentaban saber qué pasaba a su alrededor...

El desayuno ha terminado con buen sabor de boca y con la clara decisión de los comensales de implicarse más en echar una mano a los invidentes de Guadalajara. Francisco Marfíl, director de la ONCE, ha valorado muy positivamente la iniciativa ya que los políticos "han sentido durante un ratito lo que sentimos cada día".

Desde el Ayuntamiento de Guadalajara el alcalde, Alberto Rojo, se ha comprometido a tomar medidas "no habrá un proyecto de remodelación de vía pública sin preguntarles cómo se debe colocar el mobiliario urbano"- ha asegurado. También ha anunciado medidas para que puedan disfrutar del ocio en el Teatro Buero Vallejo. "Ha sido una sensación que en soledad debe ser muy agobiante"- ha reconocido.

El consejero de Desarrollo Sostenible ha recordado que en CLM hay una de las normativas más vanguardistas para personas con discapacidad visual "la ley está aprobado y en un año tendrá que ver la luz el desarrollo de la misma" y ha invitado a que se tomen medidas a nivel local y provincial. Escudero ha reconocido que se ha sentido vulnerable, que ha tenido dificultades para desayunar y que se iba con el estomágo más vacío de lo que desayuna habitualmente.

Para José Luis Vega, el presidente de la Diputación, la experiencia ha sido reveladora y dura. Ha reconocido que lo ha pasado mal y que ha tenido una gran sensación de agobio desde el principio. Ha asegurado que no lo ha disfrutado y se ha llevado la tarea de trabajar para hacer la sociedad más inclusiva.

Por su parte el subdelegado del Gobierno asegura que ha sentido vacío "poco a poco he intentado construir el mapa mental de donde estaba, primero con el tacto y luego con el oído intentado coger referencias sonoras para identificar personas, lugares..."

Todos han salido concienciados, airosos y limpios de la prueba. Sólo el alcalde se ha manchado ligeramente una manga del traje con un poco de mantequilla...