Versiones diferentes sobre cómo se cometieron los crímenes.
La calle donde estaba el chalet asaltado./Foto: Efe/ Pepe Zamora.
El móvil del robo en el asesinato de Chiloeches, que ya apuntaban las primeras investigaciones, parece confirmado. Lo que no está tan claro es cómo se produjo la agresión y seguramente no se conocerá hasta que se levante el secreto del sumario. Mientras tanto, medios nacionales que se ocupan del caso dan diferentes versiones.
Así, El Mundo, en su edición de hoy, dice que Fernando es el que acabó con la vida del matrimonio formado por Ángel y Elvira, de 52 años, y su hija Laura, de 22. El motivo: "Les maté porque me reconocieron", dicen citando fuentes de la investigación. Según esta versión, Fernando bajó con dos machetes de grandes dimensiones, mientras David quedó esperando en el vehículo. Y cuando vio que de la casa salían llamas, huyó sin esperar a Fernando, que tuvo que escapar del lugar del crimen corriendo en dirección a Pioz, donde vivía. Fernando mató al matrimonio en su habitación y a Laura en las escaleras cuando según sospechan los investigadores intentaba huir. Luego provocó el incendio. Elvira tuvo tiempo de llamar al 112.Dentro de la casa estaba el otro hijo, Yerai, que según esta versión se atrincheró en la habitación hasta que pudo huir por una ventana. Fernando terminó en un hostal de Daganzo (Madrid) donde se alojó con su novia venezolana, también detenida como encubridora. En ese hostal los investigadores encontraron todos los objetos robados a la familia y pastillas de éxtasis.
En lo que coinciden todas las versiones es que Fernando tuvo conocimiento de que en la casa asaltada el padre tenía una colección de relojes de lujo y entre 15.000 y 20.000 euros dentro. Y que esa información se la dio imprudentemente Laura, a la que conocían por ser la ex novia del tío de David. Cuando se cometió el crimen ya habían cortado y de hecho el ex novio tenía una orden de alejamiento, aunque los investigadores descartan el movil de la violencia machista.
Esta versión publicada, hoy, por El Mundo no coincide con la que el pasado martes escribió el periodista de sucesos Nacho Abad en El Debate. Este niega que solo entrara Fernando en casa y apunta a que lo hicieron los tres implicados, y que narraron a la policía los mismos hechos. Vieron que el asalto al chalé era fácil, así que lo hablaron y diseñaron el plan de robo, que al final no les salío. Los tres saltaron la valla, entraron por la puerta de la cocina, empezaron a registrar pero no encontraron nada. Pero metieron ruido. Laura se asomó a la escalera y según este relato: "saltaron sobre ella y la apuñalaron de forma salvaje", al haberles reconocido. La madre, al escuchar el estruendo, llamó al 112 a las 3,05 de la madrugada. Los asaltantes entraron en la habitación de los padres de Laura y pelearon con ambos, sobre todo con el padre, especialista en Taekwondo. Les acuchillaron repetidamente. Abad apunta que los investigadores creen que los tres son responsables, aunque las jueza que lleva el caso no lo debe tener tan claro, ya que provisionalmente ha declarado prisión comunicada y sin fianza para los dos chicos, Fernando y David, mientras que la chica venezolana está en libertad provisional, aunque se le ha retirado el pasaporte.
Estas imputaciones son provisionales y se concretarán a lo largo de la investigación judicial, por lo que no hay que descartar cualquier otro giro en la investigación, aunque hay una cosa que sí está clara: el móvil fue el robo.
