Encuentro con una intensa nevada. Foto: GUdiario.Los azudenses merecieron más ante el Socuéllamos

Un penalti en la ultimísima jugada, en el tiempo de prolongación, le dio al Azuqueca la oportunidad de lograr un punto ante el Socuéllamos, en un encuentro condicionado por la meteorología en el que, sin duda, mereció más. El partido comenzó con veinte minutos de retraso sobre la hora prevista debido a la fina pero intensa graniza caída, que dejó el artificial del San Miguel pintado de blanco.

Una vez comenzado el juego se adaptó mejor el conjunto rojinegro, que quiso más la pelota y buscó más la portería. Los de Mario Otero trataban de combinar, buscaban las bandas y generaba las mejores oportunidades. En defensa se mostraron seguros ante un Socuéllamos que, dicho sea de paso, no creaba muchos quebraderos de cabeza. Con el paso de los minutos se le notaba más cómodo al Azuqueca sobre el campo. La tuvo Doménech, en el 18, pero el balón se estrelló en el poste; también fue clara la de Ambo, que disparó alto en el 39, con el portero ya caído.

Así, el Socuéllamos hizo poco acto de presencia ante la meta local…tan solo a partir del minuto 25 comenzaron a estirarse los visitantes, aunque bien es cierto que solo tuvieron una ocasión de verdadero peligro. A los azudenses tan solo les faltó el gol en un partido en el que, ya antes del descanso, comenzó a caer una intensa agua nieve.

Tras la reanudación, con una nevada ya profunda, se adelantó el Azuqueca. Fue en la primera jugada, una falta que remata Ambo al fondo de la red. 1-0 y toda la segunda parte por jugarse. Pero el futbol es un juego de detalles, de momentos concretos que terminan definiendo un partido.

La granizada dificultó la foto oficial. Foto: GUdiario.

Penalti
Así, en el minuto 55, un balón centrado al área por el Socuéllamos bota demasiado alto ante el despeje de la defensa azudense (tal ve fue culpa del suelo húmedo). El árbitro interpretó que había dado en la mano de un jugador local. El Socuéllamos no falló el penalti y estableció la igualada. El hecho afectó a los azudenses que, en la siguiente jugada, no supieron reaccionar ante la presión visitante. Fueron retrasando el balón y, al final, lo perdieron en la peor zona. La delantera socuellamina aprovechó el regalo para anotar el 1-2. Dos acciones, dos minutos, dos acercamientos, dos goles.

A partir de ahí, el conjunto visitante dominó el juego ante un Azuqueca que no se dio por rendido pero que intentó, tal vez, llegar más con el corazón que con la cabeza. La cosa se puso peor en el minuto 72, cuando los locales se quedaron con uno menos tras la expulsión de Moraga. Entrada y roja directa. Los azudenses lo siguieron intentando, mientras el Socuéllamos pudo sentenciar claramente a la contra.

Aun así, el Azuqueca la tuvo en el minuto 44, en las botas de Rober, pero Bernabé (¡que paradón!) detuvo un disparo a bocajarro. En la última, con el Azuqueca volcado, el colegiado no dudó en señalar un claro penalti, también sobre Rober. Borja Cabanillas no falló y el Azuqueca rescató un punto en una tarde fría en la que, repetimos, quizá mereció más.

Ficha técnica
CD Azuqueca: Álvaro, Beltre, Moraga, Gabino, Domenech (Abel Molinero´83), Izan (Borja Cabanillas´62), Fane, Juanpe (Pancorbo´62), Lucas, Diego, Ambo (Roberto´83).
Socuéllamos: Bernabé, Cruz, Escobar, Rodrigáñez, Hujo (Moussa´86), Fresneda (Álvaro´60), Anaba, Pablo (Briega´46), Yemoh, Navarro, Serrano.
Goles: 1-0. Min.47. Ambo. 1-1. Min.58. Cruz (p). 1-2. Min.59. Briega. 2-2. Min.90 (+4). Borja Cabanillas (p)
Árbitro: Alberto Marchante Campillo. Mostró cartulinas amarillas a Gabino y Beltre, por parte del Azuqueca y a Fresneda, del Socuéllamos. En el conjunto local expulsó a Moraga, con tarjeta roja directa, en el minuto 72.
Incidencias: encuentro correspondiente a la jornada número 23 de la Tercera División, disputado en el estadio “San Miguel”, de Azuqueca. El partido se retrasó justó cuando iba a comenzar debido a la intensa granizada, que obligó a jugadores y árbitro a refugiarse en vestuarios. El juego se inició veinte minutos después, cuando cesaron las precipitaciones, sobre un césped blanco. El encuentro estuvo condiciono por la lluvia, la nieve y el intenso frío durante todo el desarrollo del mismo.