Las multas para los dueños que no recojan los excrementos llegarán a 3.500 euros
A partir del 1 de marzo la policia vigilará que todos los perros estén censados y con el ADN correspondiente
Alovera, con más de 12.000 vecinos, tiene 800 perros censados, una cifra que pocos que se creen. La situación de suciedad se estaba volviendo tan insostenible que el ayuntamiento, en marzo de 2021, actualizó su ordenanza de tenencia de animales, una ordenanza que comienza así:
“Desgraciadamente, estamos asistiendo a situaciones lamentables que atentan contra la salud y la seguridad públicas, como es el hecho de encontrar excrementos de perros en las calles, parques y hasta en las zonas acotadas para juegos de niños y el ataque o su intento a las personas. Estos hechos hacen necesaria la actuación municipal mediante su regulación y sanción de unos hechos que, evidentemente, no se deben producir.”
Dicho y hecho. El ayuntamiento de Alovera quiere que todos los perros del municipio estén censados (ahora se contabilizan unos 800) y quiere además que todos dispongan de su ADN canino, una manera de presionar a los dueños para que se encarguen de recoger las cacas de sus mascotas cuando las saquen a la calle.
En diciembre de 2021 se inició el censo de ADN. El ayuntamiento está realizando las pruebas correspondientes de forma gratuita pero, partir del 1 de marzo, las pruebas deberán ser pagadas por cada vecino con un coste que ronda los 40 euros. También a partir de esa fecha se empezará a multar a los que no hayan registrado a su mascota.
Una vez realizada la prueba el dueño del perro recibe un código Qr asociado al animal, si se recoge una caca que pertenece a ese animal y que no ha sido retirada por el dueño, habrá multa y puede llegar hasta los 3.500 euros.
¿Y que pasa si el perro no está censando y no tiene la prueba de ADN correspondiente? Pues se multará por otra vía porque es obligatorio que todos los perros estén censados y será la policía local quien se encargue de comprobar que los perros tienen su código QR.
La policía local será también quien recoja los excrementos, para, después, ser analizados por una empresa especializada. Tras el análisis y detectar quien es el propietario del perro, se tramitará la multa correspondiente.
La idea del ADN, que va a costar unos 80.000 euros a Alovera, está funcionando, y con éxito, en municipios cercanos. Según publicaba hace unos días el diario El Confidencial Meco y Ajalvir habían reducido de forma importante la suciedad de las calles con este sistema. En Meco se había reducido en un 85%. De momento en Alovera no saben cómo funcionará pero ya están notando mucha afluencia de vecinos que quieren poner todo en orden antes del 1 de marzo.