Del 4 al 13 de septiembre
Sigüenza celebra desde este jueves y hasta el día 13 , sus jornadas paleontológicas, una actividad que busca apoyar la proyección internacional de la ciudad y su candidatura a Patrimonio Mundial.
El programa se estructura en diferentes espacios y fechas. En las mañanas del jueves 4 de septiembre, y del viernes, 5 de septiembre, en el Centro de Arte La Plazuela, se expondrán fósiles originales y réplicas, acompañados de paneles explicativos y talleres didácticos para descubrir las faunas del pasado. Por la tarde, en el Teatro-Auditorio El Pósito, el grupo PaleoIbérica impartirá conferencias científicas sobre geología y paleontología del Triásico de Sigüenza, el mar prehistórico y sus invertebrados, los reptiles marinos y costeros y la información que aportan sus huellas fósiles. Se sumarán intervenciones del Grupo de Bioacústica Evolutiva, presentando los orígenes evolutivos del lenguaje y los primeros cuidados humanos en la Prehistoria, uniendo biología, neurociencia y cultura.
El sábado 13 de septiembre, el itinerario geo-paleontológico será el broche final: una salida en autobús desde Sigüenza a Riba de Santiuste para conocer “nuestra costa de Pangea”, y visita al yacimiento de Los Arroturos, donde las familias podrán caminar literalmente entre huellas de hace más de 200 millones de años. Esta actividad requiere inscripción previa en paleoiberica@gmail.com. Todas las actividades son gratuitas y destacan por su rigor científico y su enfoque abierto a toda la sociedad.
El evento se enmarca en la Cátedra Sigüenza, fruto del convenio suscrito entre la Diputación Provincial y la Fundación General de la Universidad de Alcalá de Henares, y cuenta con la colaboración decisiva del Ayuntamiento de Sigüenza.
Hay que recordar que hace más de 200 millones de años, Sigüenza y su comarca formaban parte del megacontinente Pangea, bañado por mares habitados por fascinantes organismos y playas recorridas por extraños reptiles. La rareza de encontrar fósiles marinos y terrestres en la región se explica porque entonces grandes extensiones del actual territorio eran una costa cálida, como atestiguan los fósiles y las formaciones de sal tan características de Sigüenza. Prueba singular de este pasado son yacimientos únicos en la Península Ibérica, como el de Los Arroturos, donde aparecen más de 600 huellas fósiles de rauisuquios, reptiles precursores de los actuales cocodrilos, registradas en la roca de hace más de 240 millones de años, un tesoro paleontológico comparable únicamente a los grandes hallazgos de Centroeuropa.