Confusa declaración de dos trabajadores de la planta sobre la naturaleza de los residuos que trataban por orden de la empresa.

La declaración de M.S.L. ha sido muy confusa respecto a qué restos mezclaba al cargar los camiones

M.S.L, maquinista de la planta de residuos de Chiloeches, desde 2015 hasta 2016, ha reconocido hoy en sede judicial que en esta planta se mezclaban residuos de construcción con lodos. A preguntas del Ministerio Fiscal, M.S.L., que era quien cargaba los camiones que después se llevaban a los vertederos de Salmedina y Las Mulas; ha reconocido que había unas trojes al fondo de la planta donde los camiones descargaban lodos y que él lo mezclaba “porque me lo mandaba Manuel (en referencia a Manuel Layna) y además me lo repitió varias veces” ha confirmado.

M.S.L ha reconocido que una vez mezclados se cargaban los camiones de Layna para llevarlos a los vertederos y que para evitar que chorreasen las bañeras del camión (que no eran estancas) ponía una base de papel “y así absorbía un poco”- ha confirmado. Tras esa base ponía escombro, una capa de lodos y otra capa de escombro.

También ha confirmado que había dos camiones que realizaban entre 4 y 5 viajes al día, camiones a los que se sumaron después tres más que fueron, después, subcontratados.

En su declaración ante el Ministerio Fiscal el acusado ha dado a entender que en esa mezcla de lodos había de todo: restos de celulosa, y otro tipo de residuos líquidos, pero ante las preguntas de otros abogados ha empezado a mostrase confuso y a no saber precisar qué formaba esa capa de lodos que echaba escondida en los camiones, llegando a decir finalmente que no se echaban esos líquidos. Una situación que ha intentado aclarar la Ministerio Fiscal pidiendo al tribunal algunas observaciones pero éste se ha negado.

En otro orden de cosas el Ministerio Fiscal le ha preguntado si esas cargas, que llevaban lodos mezclados, eran considerados como residuos de construcción algo que el acusado ha asegurado desconocer.

Una planta saturada

Sobre la saturación de residuos en la planta ha señalado que había cada vez más, que era algo que comentaban entre los compañeros. De hecho, ha declarado que cada vez era más difícil mover la máquina para hacer su trabajo y que los camiones también lo tenían difícil para transitar. Algo que ha confirmado otro compañero R.P.C que ha sido el segundo acusado en declarar en el día de hoy. R.P.C. ha asegurado que cuando él llego a trabajar a finales de 2015 la planta ya estaba al 80% de su capacidad.

Sobre si se producían vertidos de líquidos en la planta que podían filtrarse en el terreno, M.S.L. ha indicado que a veces los bidones de plástico estaban hinchados y que lo que hacían eran destaparlos para deshincharlos. Ha negado que los pincharan y ha señalado que si había algún vertido accidental lo limpiaban, negando por lo tanto vertidos en el suelo.

El acusado también ha declarado que él no sabía distinguir entre residuos peligrosos y no peligrosos porque no recibió ninguna formación sobre ello.

A preguntas de su abogado el acusado ha señalado que él no creía que lo que hacía fuera ilegal ya que hacía lo mismo que hacía su compañero anterior en ese mismo puesto.

Con las dos declaraciones de hoy se cierra la toma de declaraciones de los acusados pasando el jueves a la prueba testifical.