Fue derribada por un vecino a pesar de las advertencias del ayuntamiento para que no lo hiciera
Pastrana (Guadalajara) ha recuperado la ermita de la Virgen de los Remedios, tras su rehabilitación así como de su retablo y sus imágenes, igualmente restaurados, con lo que este bien protegido vuelve al uso cultural y religioso tras diez años en estado de espera y abandono.
Una vez ha terminado su reconstrucción, el obispo de la Diócesis de Sigüenza-Guadalajara, Julián Ruiz Martorell, realizó este sábado 15 de septiembre la bendición de esta ermita.
La ermita fue derribada de forma sorpresiva en 2014 por un vecino que iba a hacer obra en una casa colindante. Ese vecino se quejaba de que se había construido la ermita tapiando unas ventanas de su vivienda, y aunque el ayuntamiento le pidió expresamente que no la dañara cuando empezó las obras tiró su casa vieja y la propia ermita. Antes pidió la llave de la ermita a un miembro de la Hermandad y dejó en la calle las imágenes que había dentro,( la Virgen de Nuestra Señora de los Remedios, San Pedrillo y el retablo) que resultaron dañados. El tema fue llevado a los tribunales y ha tardado años en resolverse.
Ahora,diez años después, la Parroquia de Nuestra Señora de la Asunción, que ha recuperado el máximo de elementos arquitectónicos que la configuraban, como sus valiosos sillares esquineros; ha procedido a su reconstrucción.
Para completarla han sido, además, necesarios fondos del grupo de acción local Adasur, que han sido solicitados por la Parroquia, como promotora de la recuperación.
La ermita es un bien protegido -con el número 21 en la carta arqueológica de Pastrana- en el Plan de Ordenación Municipal del municipio.
Según la documentación de la Diócesis Sigüenza-Guadalajara, la inmatriculación del bien de la ermita por parte de la Parroquia data del año 1929, si bien su construcción es mucho más antigua y siempre ha sido sede de la Hermandad de Nuestra Señora de los Remedios.
La ermita forma parte del conjunto histórico artístico de la Villa de Pastrana, desde 1966.