Evitará decenas de desplazamientos a otras provincias para realizar pruebas
El nuevo servicio comenzará a funcionar en unos meses/ JCCM
El nuevo servicio de Medicina Nuclear del Hospital Universitario de Guadalajara tiene previsto iniciar su actividad en otoño, tal y como ha adelantado hoy el director gerente del SESCAM, Alberto Jara, durante la visita que ha realizado a las instalaciones. Una nueva instalación que evitará desplazamientos a otras provincias para realizar estas pruebas.
Según las previsiones del Servicio, se estima que anualmente van a realizar alrededor de 2.600 estudios PET-TC, otros 2.500 SPECT-TC y hasta cuatro procedimientos diarios de terapia metabólica. El año pasado desde este hospital se solicitaron más de 3.000 exploraciones de Medicina Nuclear en los hospitales de Ciudad Real, Toledo y Cuenca; y se realizaron 1.500 PET-TC en el equipo móvil que se desplaza a Guadalajara.
El nuevo servicio, que ha costado 3,7 millones de euros, está dotado con equipamiento de última generación: un PET-TC, un SPECT-TC y una gammacámara portátil, entre otros. Contará con una plantilla de más de una decena de profesionales y el apoyo de servicios como el de Radiofísica y Protección Radiológica, también de nueva creación, y trabajará en estrecha colaboración con otros servicios como Radiodiagnóstico y Oncología Radioterápica, otra de las nuevas prestaciones que se va a incorporar en breve.
La Medicina Nuclear se usa para el diagnóstico por imagen y el tratamiento de determinadas enfermedades -oncológicas, cardiológicas, endocrinas…- mediante el uso de medicamentos radiofármacos.
Nuevo ortopantomógrafo
Nuevo ortopantomógrafo/ JCCMPor otra parte, ha visitado el nuevo ortopantomógrafo con el que se ha dotado al Servicio de Cirugía Oral y Maxilofacial y que ha costado 640.000 euros. En la provincia de Guadalajara se han renovado los equipos instalados en el Hospital y en el CEDT de Azuqueca de Henares.
El ortopantomógrafo es un equipo que permite realizar pruebas radiológicas panorámicas de toda la mandíbula. Ofrece una visión amplia y detallada sin necesidad de realizar muchas radiografías. El equipo con el que contaban hasta ahora era de 2006 y presentaba constantes averías.
El nuevo equipo es digital, está dotado con tecnología 3D y ofrece mayor resolución y precisión diagnóstica. Tarda menos tiempo en hacer la prueba, lo que contribuye además a reducir la dosis de radiación que recibe el paciente (hasta un 50 por ciento menos) sin comprometer la calidad de la imagen. Hasta ahora se venían haciendo unas 3.600 pruebas que, seguramente se incrementarán con el nuevo equipo.